El día 29 de julio inician los monitoreos en las parcelas agrícolas, en ambas se observaron a las plantas de C. juncea secas en la totalidad del área sembrada. Los registros de lluvias se mantienen en un acumulado de 160 mm desde la siembra (20 de febrero) hasta la fecha. Fue visible los daños por la seca, plagas y luego por las heladas que terminaron dañando lo poco que quedaba de los cultivos, así como también fueron afectadas las malezas a causa de las bajas temperaturas.

La erosión visualizada en el mes de junio y mencionada en el informe anterior se observa en la mayor parte de la superficie de ambas parcelas. El área donde no se visualizó este efecto fue en el lugar de siembra del nabo en la 103 A. La profundidad de los surcos oscila entre 5 y 10 cm.

El crecimiento de las plantas de C. juncea llegó hasta los 110-125 cm de altura antes de detenerse por la falta de lluvias. Con respecto al nabo, no se visualizó la emergencia del cultivo en el área sembrada.

En la parcela 103 B fueron realizadas tres calicatas para observar el desarrollo radicular de la C. juncea. Se pudo visualizar crecimientos de hasta 50 cm de profundidad de las raíces, se destaca de este cultivo su gran desarrollo en búsqueda de agua y nutrientes, además de aportar al aireado y descompactación de las partes radiculares.

El día 30 de julio fueron tomadas 5 muestras de suelos y enviadas al laboratorio Timac para análisis. Los lotes seleccionados para la toma de muestra fueron:

MA. VICENTA

1. Potrero 401

2. 3. Potrero 104 B

3. Potrero 2

LA PORTEÑA

4. Potrero 12

5. Campo de fardo.

El ensayo comparativo de sorgo se encontraba también plenamente secos, asi como los cultivos de cobertura milleto, C. juncea y B. ruziziensis sembrados en el ensayo experimental. El efecto de la sequía y la helada terminó dañando a todos los cultivos del área.

Se destaca que el Sorgo Agri 002E ubicado en la cabecera misma de parcela hacia la pista esta bastante recuperado nuevamente.

Con respecto al ensayo de abonos verdes de invierno, solo quedaron en pie algunas áreas del nabo y trigo. Se observó que el desarrrollo radicular del nabo fue diferenciado según fue realizada la siembra, en los lugares donde se utilizó el escarificador la compactación fue menor y por lo tanto el desarrollo radicular fue óptimo, no así en las áreas sin descompactar donde se observaron raíces muy gruesas a causa de la compactación del suelo.

Parcela 103 A y B

29/julio:

• Inician los monitoreos en las parcelas agrícolas, en ambas se observaron a las plantas de C. juncea secas en la totalidad del área sembrada. Fue visible los daños por la seca, plagas y luego por las heladas que terminaron dañando lo poco que quedaba de los cultivos, así como también fueron afectadas las malezas a causa de las bajas temperaturas.

• La erosión visualizada en el mes de junio y mencionada en el informe anterior se observa en la mayor parte de la superficie de ambas parcelas. El área donde no se visualizó este efecto fue en el lugar de siembra del nabo en la 103 A, tampoco se visualizó la emergencia del cultivo en el área sembrada.

• En la parcela 103 B fueron realizadas tres calicatas para observar el desarrollo radicular de la C. juncea. Se pudo visualizar crecimientos de hasta 50 cm de profundidad de las raíces.

30 de julio:

• Fueron tomadas 5 muestras de suelos y enviadas al laboratorio Timac para análisis.

Área experimental

29/julio:

• El ensayo comparativo de sorgo se encontraba plenamente seco, asi como los cultivos de cobertura milleto, C. juncea y B. ruziziensis sembrados en el ensayo experimental. El efecto de la sequía y la helada terminó dañando a todos los cultivos del área.

• Con respecto al ensayo de abonos verdes de invierno, solo quedaron en pie algunas áreas con nabo y trigo. Se observó que el desarrollo radicular del nabo fue diferenciado según fue realizada la siembra con y sin escarificador.

• Monitoreo de parcelas, para el control de plagas o malezas. En caso se detecte un caso mencionado, comunicar a la consultora.